La flota cercana a 600 petroleros rusos ‘en la sombra’, que está utilizando el Gobierno de Vladimir Putin para transportar y vender su petróleo eludiendo las sanciones interpuestas al país, supone una «amenaza» a la flota mundial y al medio ambiente, ya que están operando con normas de mantenimiento «más bajas» que el resto, según se advierte en el informe ‘Safety & Shipping Review 2023’ de Allianz Global Corporate & Specialty SE’s (AGCS).